Dr. Mario Carlos Aggio

Resumen

El 25 de octubre falleció el Dr. Mario Carlos Aggio.

Mario, a lo largo de su vida, se destacó por sus méritos éticos y científicos.

Recibió lo que para nosotros, los hematólogos, es un galardón: ser nombrado por sus pares “Maestro de la Hematología”. Este premio es la consagración de una trayectoria con su reconocimiento público, porque ser “Maestro de la Hematologia” no es un premio que se otorga por un trabajo o un descubrimiento, sino que se obtiene por la labor meritoria de toda una vida.

Mario fue un verdadero Maestro, fue un ejemplo de vida en virtud de sus conocimientos y sus cualidades éticas y morales, influyó en la vida de los demás, forjando maneras de pensar en el orden médico y personal. Para lograrlo, es imprescindible tener marcadas virtudes que se ven reflejadas en una gran cantidad de discípulos.

Compartí gratas charlas, donde demostró su humanidad y sus sentimientos para con su familia, el golf y Olimpo.

Era un apasionado por la medicina y por el conocimiento, nunca tuvo ambición personal. El único poder que buscó Mario era el que otorga el conocimiento; el conocimiento como ética en el sentido socrático. Su humildad lo llevó a resignar la oportunidad de la presidencia de la SAH.

Fundó el Grupo Hematológico del Sur, al que llevó en su corazón y defendió a capa y espada con entusiasmo y generosidad.

En los últimos años su capacidad de trabajo fue mermando y luchó entre su enfermedad y las obligaciones como médico, pero nunca perdió la oportunidad de actualizarse y de compartir experiencias.

Que su paso por la vida sirva de ejemplo para los que lo conocimos.